"Un plan sencillo" de fidelidad

Cuando inicias un plan de fidelidad, seguramente ya tienes una base de clientes fieles a tu marca. No hace falta ser un adivino o adivina para figurarse que algunos de tus clientes ya han decidido que sólo irán a tu recinto.

Por otra parte, cuando comiences el plan de fidelidad, encontrarás al revisar los datos que genera, que muchos de los clientes afiliados a él, no cumplen los criterios de fidelización que esperamos: sólo ir a tu recinto. 

Sin embargo, un plan de fidelidad va a ser muy relevante por la información que genera, y la utilidad de esta en la toma de decisiones trascendentales en el devenir de las operaciones de tu negocio. 

A la vista de lo anterior tenemos que distinguir dos términos operativos en la materia que nos ocupa; De una lado, qué es un fidelizado; entendemos por tal, aquel consumidor de tu marca o producto que ya ha decidido que siempre irá a tu negocio. O al menos, de momento no se plantea ir a un competidor directo. Recuerde la diferencia de tiempo que existe entre el necesario para ganar un cliente y el que se requiere para perderlo.

Por otra parte tenemos el concepto de afiliación; con el que describimos el acto voluntario de unirse a un plan de fidelización y ceder sus datos personales por unas recompensas atractivas en el consumo.